17.10.08



                     













(...) Mientras que los bienes manufacturados pueden ser modernos, funcionales, duraderos, bellos e incluso inspiradores, el mismo hecho de que estén producidos en masa los hace desechables. En cambio, un objeto hecho a mano, como un chal de punto, por su carácter único, sus caprichos e imperfecciones, lleva la huella de su creador. Percibimos el tiempo y la meticulosidad que ha dedicado a su obra y, en consecuencia, sentimos hacia ésta un mayor vínculo afectivo. (...)

"Elogio de la lentitud", Carl Honoré

2 comentarios :

Anónimo dijo...

oye,que bonito tu trabajo.

Andresito dijo...

Que envidia de blog. Tan buen gusto y de una manera tan sencilla no abunda mucho. Hay que visitarte cada dia.