Este post quiere ser una receta veraniega y una disculpa.

Resulta que hace unos meses inicié toda una historia llamada "una porción y media". Publicaba resúmenes de lo que iba pasando de fotos en este blog, proponía alimentos mensuales en torno a los que tenían que girar los manjares... insistía en asentar unas bases de funcionamiento del grupo... Algunos empezaron a motivarse con el tema y subían fotos al Flickr común, lié a Cristina de Pimienta Rosa para que nos ofreciera cada mes una receta relacionada con el alimento propuesto... y de repente me callé. Han habido cambios en mi vida y muuuucho trabajo que sacar adelante, que no me han permitido estar a la altura  -_- 

Mi sorpresa es enorme cada vez que entro en el pequeño grupo de gente que come en solitario, y veo que seguís colgando fotos... y me siento fatal por no estar diciendo nada acerca de ello, y al mismo tiempo me maravilla que funcione sin que sea yo la que esté soplando las brasas! Así que este post os lo debía "Porciones y Media"! Lo siento mucho, soy una lianta. Pero a la vez os propongo seguir manteniendo el grupo vivo, subir fotos de lo que comemos en solitario es placentero y beneficiosos ;) Y prometo que a la que pueda, volveré a proponer temas, que jugar siempre es mejor. Mil gracias por vuestra perseverancia!


En cuanto a la receta, se trata de una sopa de puerro y manzana. Fresca, depurativa y muuuy fácil de elaborar.

Yo uso:

tres puerros
una manzana golden
una cebolla pequeña
una patata pequeña
agua, aceite, sal y una pizquita de pimienta.

Lo que hago es:

Cortar a trozos no especialmente pequeños el puerro y lavarlo bien. Cortar la cebolla. Pelar y cortar, tanto la manzana como la patata.


En una olla pongo un fondo de aceite, y sofrío el puerro junto a la cebolla, espolvoreando un poco de sal.Cuando ya está blandito, añado la patata y la manzana y lo mezclo bien. 


Después lo cubro con abundante agua. A mi me gusta con mucha agua, para que el resultado sea bien líquido. Le añado sal y lo dejo hervir durante unos 30 o 35 minutos.


Triturarlo todo bien triturado (no escatiméis en rato de turmix!). Rectificar de sal, y añadirle un pelín de pimienta. Finalmente lo que hago es pasarlo por un colador grande fino, y le voy dando con un cucharon de sopa para que el resultado sea casi líquido.


Se sirve bieeeen frío!